El 2 de febrero de 2018, BMG lanza "WALK BETWEEN WORLDS", el primer álbum de Simple Minds con material nuevo desde la Big Music de 2014 (la revista MOJO declaró "su mejor álbum en 30 años").
WALK BETWEENWEEN WORLDS fue producido por Simple Minds junto a Andy Wright y Gavin Goldberg, quienes trabajaron en Big Music. Con sus ocho temas pasando por delante en 42 minutos, es un asunto relativamente conciso. También es un álbum de dos caras distintas, muy parecido al formato de álbum de la vieja escuela con el que crecieron el cantante Jim Kerr y Charlie Burchill como fans de la música. Al lado de una canción como Summer y The Signal And The Noise repasa las guitarras vidriosas y los nuevos ritmos de danza de onda de la era post-punk y la segunda mitad explora más sonidos cinematográficos, con la canción de título y Barrowland Star, ambas con dramáticas orquestas grabadas en Abbey Road.
El álbum está compuesto por dos canciones sobre la fe, Magic and Sense Of Discovery. La primera es una reflexión sobre el deseo y el hambre de los jóvenes - la fe en sus propias habilidades que Simple Minds poseía durante sus años de formación. Sense Of Discovery, que presenta un estribillo melódico que alude a Alive And Kicking de 1985, se centra en la voz de un narrador mayor que transmite sabiduría y consejos a un individuo más joven.
Uno de los temas clave del álbum es Barrowland Star, que lleva el nombre del salón de baile icónico en el East End de Glasgow que ha albergado muchos espectáculos memorables de Simple Minds. Es una canción que aleja a la banda de su zona de confort tradicional, sus cuerdas de superposición y un fascinante solo de guitarra Charlie (uno que le recuerda a Jim a Mick Ronson) sobre algunas palabras conmovedoras. Para Jim y Charlie tocar en Barrowland siempre fue una gran cosa, una mezcla de emoción - y temor - sentían como si estuvieran a punto de participar en una pelea de premios en vez de simplemente tocar un concierto de rock.